El mono vacilón

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Aquí os dejo un nuevo vídeo de naturaleza en el que un mono con un par de... narices, o con muy poco amor a la vida, empieza a vacilar a dos tigres jóvenes dándoles capones y tirándoles de las orejas. Os va a encantar. Un saludo.

El reloj de la Puerta del Sol

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¡Feliz Navidad!. Como ya estamos metidos de lleno en estas fechas, y siguiendo con las curiosidades sobre la ciudad de Madrid, aquí os dejo un poco de historia sobre el reloj que marca el final del año para casi todos los españoles, y que hace que muchos nos atragantemos con las uvas intentando que el año entrante sea mejor que el que dejamos. Espero que os guste. Felices Fiestas a todos.

El famoso carillón fue construido en Londres en 1866 por José Rodríguez Conejero, natural de La Hiruela, localidad leonesa de la comarca de Losada. El relojero lo fabricó en un taller londinense, pues Inglaterra (en pleno auge de la Revolución Industrial) era uno de los países pioneros en mecánica e ingeniera. El reloj funciona con pesas y tiene un depósito de aceite para engrasar su maquinaria. Desde 1996 la relojería Losada (toma el nombre de la comarca donde nació Conejero) se encarga del mantenimiento.
El 19 de noviembre se pone en marcha el reloj de Gobernación, que se convierte en la atracción del momento, aunque pronto pasaría a ser objeto de mofa a consecuencia de los retrasos, y algún cesante, o poeta fracasado, reparte octavillas con el siguiente texto:
Este reló tan fatal
Que hay en la Puerta del Sol
-dijo un turco a un español-
¿Por qué funciona tan mal?
Y el turco con desparpajo
contestó cual perro viejo:
«Esté reló es el espejo
del Gobierno que hay debajo».
Corregidos estos desajustes por las expertas manos de Losada, el reloj empezó a ser ejemplo de puntualidad y se convirtió en emblema de la Villa y Corte. Antes de que presidiera la Real Casa de Correos, actual sede del Gobierno regional, el reloj coronó la iglesia del Buen Suceso. Conejero se lo regaló a la reina Isabel II y ésta lo donó a este templo para que sustituyera a otro que se encontraba muy deteriorado. Su cometido principal durante el siglo XIX fue el de avisar de las horas a los madrileños. El que estaba lejos oía las campanadas; el que estaba cerca -y también a considerable distancia- veía caer la bola. Por aquella época muy pocas personas poseía reloj. El mecanismo del histórico carillón está sincronizado con el observatorio de la Armada, situado en San Fernando (Cádiz). El reloj marcaba la hora de salida de las diligencias y de los coches de alquiler; servía de lugar de cita y referencia para los Isidros.
Pocos años después de su instalación nacería la costumbre de concentrarse en la noche de San Silvestre en la Puerta del Sol para despedir el año con las 12 campanadas. Allí se daba cita el pueblo, la bohemia, los poetas y los menesterosos. Hasta el mismo rey Alfonso XIII se mezcló con los madrileños en la Nochevieja de 1930 para recibir al año nuevo en la Puerta del Sol. La radio y la televisión (más el deseo el régimen franquista de vender unidad y hermanamiento) consiguieron que se popularizara este hábito.

El origen del rito de tomar las uvas

El origen de la tradición de tomar doce uvas al son de las campanadas de la medianoche de fin de año se remonta a principios del siglo XX. La idea de las doce uvas parte de 1909, un año muy bueno para los agricultores y tan bueno fue que hubo un gran excedente de uva. Como no sabían qué hacer con ella decidieron dar salida a la producción sobrante diciendo que consumirlas el día de Nochevieja garantizaba buena suerte para el año venidero. Esta costumbre, que se cree da buena suerte a aquel que consigue tomarlas una a una, al mismo tiempo se debe pedir un deseo por cada uva y campanada. Si se toman las doce uvas a tiempo antes de que terminen las campanadas es símbolo de buena suerte.

El leopardo que cuida a su presa

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Aquí os dejo este impresionante vídeo de naturaleza en el que un leopardo caza un babuíno, y antes de deborarlo el babuíno pare una cría. Es increíble lo que hace el leopardo. Muchos humanos deberían tener la misma sensibilidad. Gracias a Marta por mandarlo. Espero que os guste. Un saludo.

El Campo del Moro

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Desconocido incluso para muchos madrileños, los jardines reales del Campo del Moro es un estupendo jardín situado bajo el Palacio Real, tras el gran desnivel que daba fortaleza defensiva a las antiguas murallas madrileñas. Estos Jardines deben su nombre a que este lugar era usado por los musulmanes (almorávides o almohades) para acampar las tropas que sitiaban la ciudad en la edad media, de ahí que popularmente se le conociera como Campo del Moro. No se le llamó así hasta el siglo XIX.
Los terrenos donde se encuentra fueron adquiridos por Felipe III a comienzos del siglo XVII, para convertirlos en jardín de su residencia y escenario de fastuosas fiestas cortesanas. Cuando en el año 1734 el Alcázar quedó destruido a causa de un incendio, se decidió levantar en su lugar un gran palacio. Los jardines rodean el majestuoso edificio del Palacio Real. Durante la construcción del Palacio Real, los jardines fueron usados como escombrera.

Felipe IV mandó acondicionar el lugar, construyendo fuentes y plantando numerosos olmos. Hasta el siglo XVII su destino hacia las veces de lugar de caza menor. La creación del Jardín del Campo del Moro no se inicia hasta el reinado de Isabel II, en estos años se diseña un gran parque y se instalan las fuentes de los Tritones, traída del Palacio de Aranjuez y la de las Conchas, procedente del Palacio de Boadilla. Desgraciadamente con la caída de Isabel II hubo un periodo de abandono y descuido en el que se perdió una parte del diseño del jardín que era de tipo romántico. No fue hasta la Regencia de María Cristina cuando se inician una serie de obras de recuperación, otorgándole el diseño actual siguiendo el trazado de los parques ingleses del siglo XIX. Al igual que sucediera con la Casa de Campo, esta posesión real pasó a formar parte del municipio en 1931.

Feliz Navidad

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Me parece genial la portada que ha hecho el Jueves, tomándose la revancha por el secuestro de la ya famosa portada con los príncipes. Yo la aprovecho para felicitar las fiestas a todo el mundo. ¡Feliz Navidad!. Un saludo.

Como quitarse unas esposas con una horquilla

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En este vídeo se muestra como se pueden abrir fácilmente unas esposas con la típica horquilla del pelo (los hombres lo tenemos más difícil). Muy curioso, espero que no lo necesitéis nunca. Un saludo.

La puerta del Sol

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Aquí tenéis una nueva entrada sobre curiosidades de la ciudad de Madrid. En este caso, el origen del nombre de la castiza Puerta del Sol. Un saludo.


Las primeras noticias de la existencia de una Puerta del Sol datan de 1478. La entrada era una de las existentes en la muralla de la ciudad. La muralla recogía en su perímetro los arrabales medievales que habían ido creciendo extramuros, en torno a la muralla cristiana del siglo XII.
En los primeros meses del año 1520 toda Castilla, por aquel entonces reino independiente al menos teóricamente, se hallaba inmersa en la denominada 'Guerra de las Comunidades' contra las pretensiones del flamenco Carlos I de Gante, nieto de los Reyes Católicos, que llegaría a ser Carlos V de Alemania. Son el bachiller Gregorio del Castillo y el procurador Juan Negrete, por la collación de San Ginés, los que lideran a los comuneros madrileños. En lo más moderno de la villa construyeron fortificaciones, barricadas y fosos, y en el oriental lindero de la población dicen unos historiadores que los rebeldes levantaron un castillo, y afirman otros que convirtieron en fortaleza la puerta allí existente, en cuyo arco representábase un Sol, tal vez porque miraba a Oriente. Desde entonces la plaza se llamó de este modo: Puerta del Sol.
En 1539, ya es una puerta «de ladrillo y cal, y una anchura suficiente para que pasen dos carros», que tenía como misión el que los mercaderes pagaran un peaje al atravesarla con sus productos. Y 27 años más tarde, una ampliación de la muralla hizo que dejara de ser periferia para integrarse en el cogollo de la ciudad.
Su emplazamiento debió de ser, aproximadamente, el que hoy ocupa la estación del Metro, de frente a la que hoy es la Carrera de San Jerónimo.
El Siglo de Oro convirtió a la Puerta del Sol en un lugar de reunión típico, donde se gente se reunía en torno a las Gradas de San Felipe, en la iglesia de San Felipe el Real, situada en la Puerta del Sol esquina Calle Mayor. En aquel entonces ocupaba sólo la mitad del espacio actual.
La forma actual de la Puerta del Sol no se verá hasta la construcción de la Casa de Correos, acabadada en 1768. Este edificio pasó a ser posteriormente sede la la Gobernación de Interior y cuentan que sus calabozos subterraneos eran un destino habitual de los disidentes de inicios del siglo XX, como el famoso
escritor Valle Inclán. Tras la conversión de la Casa de Correos en sede del Ministerio de Gobernación (1847), se decide derribar algunas casas de la zona para realzar el edificio y darle seguridad. El resultado sería la creación de una gran plaza.

Pilar Rubio

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Señores y....señoritas que quieran, aquí os dejo este vídeo del "Making off" del reportaje de una revista (para que más publicidad) a la impresionante Pilar Rubio. Sin comentarios, sólo disfrútenlo. Un saludo.

Eloy Gonzalo y la plaza de Cascorro

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Espero que este post sea el primero de muchos, en los que iré contando curiosidades e historias de la ciudad de Madrid. Reconozco que, a pesar de haber nacido aquí, no conozco casi nada de la historia de mi ciudad, llena de curiosidades, personajes y rincones que suelen pasar desapercibidos para todos, pero que han dejado su impronta en Madrid. Para comenzar hablaré de la historia de Eloy Gonzalo y de donde viene el nombre de la "Plaza de Cascorro", y la estatua que en ella hay. Espero que os guste. Un saludo.

Biografía

La noche del 1 de Diciembre de 1868, en la puerta de la madrileña Inclusa de la calle Mesón de Paredes apareció abandonado un niño con una nota en la que se decía que había nacido aquel mismo día, que estaba sin bautizar, que era hijo legítimo de Luisa García, soltera, natural de Peñafiel, provincia de Valladolid, rogando se le pusiera el nombre de Eloy Gonzalo García. A los nueve días de su ingreso se lo llevó para criarlo Braulia Miguel, esposa del Guardia Civil Francisco Reyes.
Al cumplir los 2l años el joven Eloy fue filiado en el Regimiento de Dragones de Lusitania núm. 12, en el que fue Cabo. En 1895 fue condenado por un Consejo de Guerra a la pena de doce años de prisión militar mayor por el delito de "insubordinación" con la accesoria de cumplir en un Cuerpo de Disciplina el tiempo que le faltara para su empeño. Con arreglo al Real Decreto de 25 de agosto de 1895 que concedía la suspensión de las sentencias de los condenados por Tribunales militares destinándoseles a la campaña de Cuba, en noviembre del mismo año embarcó para la citada isla caribeña, siendo destinado al Regimiento de Infantería María Cristina núm. 63 en la Plaza de Puerto Príncipe.

El 22 de septiembre de 1896 una partida de unos tres mil insurrectos, al mando de Máximo Gómez y Calixto Garcçia, cercó la pequeña población de Cascorro, no lejos de Puerto Príncipe. La situación de los sitiados se hizo tan comprometida que la única solución era volar una casa ocupada por los insurrectos frente al principal Destacamento español. El soldado Eloy Gonzalo se presentó voluntario para tal acción, pidiendo ser atado con una cuerda al objeto de que si moría, que era lo más probable, su cuerpo pudiera ser arrastrado y rescatado para no quedar en poder de los insurrectos. Así, cargado con su fusil, atado su cuerpo con una soga, y una lata de petróleo, reptó hasta aquella casa, esparció el combustible, le prendió fuego y pudo regresar indemne a su posición, que fue liberada a los pocos días por una columna española al mando del General Adolfo Jiménez Castellanos.
Eloy Gonzalo tomó parte en más acciones militares, siendo condecorado con la Cruz de Plata al Mérito Militar, pensionada con 7,50 pesetas mensuales. Sin embargo, fallecería en el Hospital Militar de Matanzas a consecuencia de una enfermedad. Sus restos fueron repatriados y reposan en un mausoleo del Cementerio de la Almudena de Madrid junto a los de otros muertos durante los conflictos de Cuba y Filipinas.

El mito del héroe

La gesta de Eloy Gonzalo apenas tuvo relevancia militar en la guerra. Sin embargo, la figura del héroe de Cascorro se hizo muy popular en Madrid probablemente por su condición de expósito y por la necesidad de exaltar un rasgo de heroísmo individual en una guerra.
En el mismo año 1897 el Ayuntamiento de Madrid decidió homenajear a este héroe. Para ello, le dedicó una calle (la calle de Eloy Gonzalo) y levantó una estatua en el popular Rastro. La estatua fue esculpida por el escultor segoviano Aniceto Marinas e inaugurada en 1902 por el rey Alfonso XIII. Se trata de una estatua tremendamente descriptiva, que muestra a un soldado común, rifle al hombro, llevando una soga y una lata de petróleo. Más tarde, un acuerdo municipal del año 1913 bautizó esta plaza con el nombre de Nicolás Salmerón, nombre que conservó hasta que la popularidad del héroe dio paso a la denominación oficial de Plaza de Cascorro.

El pachorra... un hombre tranquilo